Se define a la Época Clásica como aquella que floreció en Grecia hacia el siglo V a.c. Y se caracterizó por retomar ideas de la antigua Grecia y de la antigua Roma, dando como resultado monumentales edificaciones.
Contexto Histórico.
La arquitectura durante el periodo clásico estuvo influenciada en gran medida por la cultura, costumbres y filosofía del imperio griego, liderado en ese entonces por el Rey Alejandro Magno.
Tanto en la arquitectura como en la escultura y en la pintura la característica principal fue la expresión exagerada de los sentimientos, esto, debido a que el pueblo griego fue de las primeras civilizaciones en adoptar el antropocentrismo; doctrina que presenta al ser humano como medida y centro de las cosas.
Un parteaguas importante se da tras la muerte de Alejandro Magno, ya que después de haber llevado la arquitectura y cultura del pueblo griego los territorios conquistados su legado se disgrega y comienza un periodo de transición determinado como periodo helenístico.
A partir de esto la arquitectura clásica comenzó a sufrir algunos cambios, los cuales normalmente se fueron haciendo más y más elaborados. El día de hoy analizaremos tres estilos arquitectónicos clásicos, establecidos como órdenes Dórico, Jónico y Corintio, cada uno de ellos diferenciados por la forma de las columnas, sus capiteles y el entablamento.
Orden Dórico.
Se trata del más antiguo de los 3, y se caracteriza por su sencillez y funcionalidad. El elemento principal del cual podemos identificar las principales diferencias con respecto a otros órdenes son las columnas, en ellas podemos encontrar 2 partes distintas, de la mitad hacia arriba se le llama “capitel” mientras que por el contrario de la mitad hacia abajo se denomina como “basamento” ó “fuste”.
Como hemos mencionado, el orden Dórico es sencillo y minimalista, aunque de grandes proporciones. Se caracteriza por tener un fuste sencillo que descansa directamente sobre la base de la construcción, posee 20 estrías distribuidas en toda la columna, además su diámetro no es constante, va disminuyendo conforme gana altura.
Las austeras columnas dóricas del templo de la Concordia, situado en el siciliano Valle de los Templos, es un claro ejemplo de este simple y funcional orden arquitectónico.
Orden Jónico.
El segundo cronológicamente hablando después del Dórico. Con respecto a su antecesor este se caracteriza por ser más esbelto y elegante, con varios elementos que lo vuelven un estilo más complejo.
La base de la columna está compuesta por tres molduras, dos boceles con acabados circulares, y una escocia posicionada en medio de ambos boceles.
Su Basamento posee 24 acanaladuras o estrías separadas entre sí por finos filetes longitudinales lo que la vuelve más elaborada y de mayor dimensiones que el de su antecesor, por otra parte su capitel se sitúa como el elemento más representativo y en este caso se caracteriza por ser mucho más elegante que el Dórico, con dos o más espirales con los que se adorna, además de diferentes ornamentos en forma de ovas y dardos, para rematar cuenta con un estrecho ábaco rectangular.
Se han encontrado abundantes muestras de su estilo, sin embargo pondremos como ejemplo el templo de Atenea Niké ubicado en la Acrópolis de Atenas.
Orden Corintio.
El órden más reciente con respecto a los otros dos; este orden tomó elementos característicos del Jónico, para después ser mejorado y convertirse en el estiló más complejo de los tres gracias a su gran cantidad de detalles.
La columna es bastante parecida al estilo jónico, consta igual dos boceles con acabados circulares, y una escocia posicionada en medio de ambos, con la diferencia que en este órden podemos encontrar uno o más elementos extra en su base, como podrían ser listeles o alguna otra pieza con forma rectangular de poco espesor.
Su basamento es básicamente idéntico al orden jónico, con 24 acanaladuras o estrías a todo lo largo, mientras que el capitel se posiciona como elemento característico, en este estilo en particular con más ornamentos y decoraciones; se diferencia con el resto por su apariencia de campana invertida o cesta de la que rebosa en las hojas de acanto, cuyos tallos dan lugar a una especie de volutas o espirales (caulículos) en las cuatro esquinas.
Como ejemplo para este orden pondremos las ruinas del templo de Zeus en Atenas.
César Hernández
